Se crea un troquel a partir de la imagen de un logotipo y luego se presiona en cuero, ante u otros tipos de tejido con calor y presión elevados. Esto permite que la imagen se asiente debajo de la superficie del producto, proporcionando un mayor valor percibido que otras formas de marca. A medida que el diseño se convierte en parte del producto, el estampado nos permite producir resultados permanentes.